Riesgo de caídas en el adulto mayor, ¿Sabes cómo prevenirlas?

Las caídas en las personas mayores son comunes. Puede resultar en una mortalidad y morbilidad significativa. Además son la causa principal de lesiones fatales y no fatales, así como puede ser el principal factor que amenace su independencia. Es así de tal manera, que en un estudio realizado en Australia, a mujeres mayores de 65 años que vivían de manera independiente; resulto en que un 80% de ellas preferían la muerte, a afrontar las consecuencias de una fractura de cadera.
Otro estudio demostró que en adultos mayores viviendo en un ambiente de cuidado a largo plazo, el 50% presentaban caídas anualmente, y de estos, el 60% tenían historia de alguna caída previa. Cabe la acotación, que las caídas usualmente resultan en lesiones menores de los tejidos blandos (moretones, rasguños) y no siempre en fractura. Más aún si se cuenta con una buena densidad ósea, y evaluación adecuada para la detección temprana de una osteoporosis. La proporción va más o menos así, 40% lesiones menores; y 10% lesiones mayores: fractura, trauma en la cabeza, heridas grandes. Y de estas, la mitad requerirán hospitalización.
Entre los factores de riesgo más comunes tenemos:
- Historia de una caída previa
- Debilidad en los miembros inferiores
- Edad
- Sexo femenino
- Algún impedimento de la visión
- Algún nivel de deterioro cognitivo
- Problemas de equilibrio
- Uso de ciertos medicamentos: psicótropicos, cardiovasculares
- Enfermedades crónicas: Artritis, Parkinson, Artrosis
- Uso de alcohol
- Calzado inadecuado
- Historia de un accidente cerebro vascular
- Hipotensión ortostática
- Mareos frecuentes
- Anemia
- Superficie irregular para caminar
- Estrés ambiental (ambientes nuevos o desconocidos
Hay muchísimos factores ambientales y condiciones físicas que predisponen a caídas, que son modificables. Los trabajadores de la salud que frecuentemente atendemos más a personas mayores, necesitamos cuestionar rutinariamente sobre caídas previas, evaluar riesgo de caídas y orientar al paciente y a su familia sobre cómo modificar los factores de riesgo.
Acá les dejamos algunas recomendaciones generales que consideramos importantes para tener en cuenta:
- Todas los adultos mayores, deberían ser cuestionados al menos una vez al año, sobre caídas previas y dificultades para mantener el equilibrio.
- A los pacientes que sólo han tenido una caída, se les debe evaluar siempre buscando algún déficit en el balance o equilibrio.
- Ejercicio – programa de ejercicios que combine diferentes categorías de ejercicio para fortalecer músculos, la resistencia y mejorar el balance. Así también, se ha demostrado que los programas de ejercicio que incluyen 3 horas a la semana de ejercicio ya tienen un impacto en la prevención del riesgo de caídas. Las principales recomendaciones son: tai-chi, clases de baile grupal y “step training” (que trata de un entrenamiento individual donde se enseña a tomar pasos dirigidos, rápidos y correctos para evitar las caídas).
- Modificación de la medicación – el médico que evalúa a un adulto mayor, debería anualmente al menos revisar su medicación, buscando oportunidades para “des-recetar” medicación que podría conllevar a un mayor riesgo de caídas (como medicación psicotrópica)
- Suplementación de Vitamina D – La vitamina D ayuda a fortalecer músculos y huesos. Esta recomendación va a depender mucho del paciente y sus niveles de vitamina D. Y la suplementación siempre o preferiblemente debería estar a cargo de un médico y no ser auto-medicada. Para prevención de caídas, la Sociedad Americana de Geriatras recomienda una dosis, por lo menos, de 1000 unidades internacionales diarias.
- Implementar medidas de seguridad en toda la casa – instalar barandas en las escaleras, puntos de agarre en el baño, mejorar la iluminación, retirar alfombras pequeñas, cambiar los pisos que puedan resbalar y provocar una caída, colocar alfombras de baño antideslizantes, entre otros.
- Uso de calzado adecuado para exteriores y pantuflas o sandalias antideslizantes dentro de casa.
- Medidas para prevenir complicaciones de darse el caso que ocurra una caída – protectores de cadera, evaluación para descartar la presencia de osteoporosis, uso de andadores o bastones.
Compartir este blog







